miércoles, 29 de julio de 2015

SOBRE OTROS SISTEMAS CULTURALES LIGADOS A LA LIJ

¿Cómo decir el otro que es el niño?
J. Larrosa

Lo que tiene su patria originaria en la infancia 
debe seguir viajando hacia la infancia
 y a través de la infancia.
G. Agamben



    La niñez, y mucho más  la adolescencia, son construcciones culturales relativamente recientes, como lo sostiene Ph. Aries. Y más próxima en el tiempo aún es la reflexión que las tiene por objeto. Diferentes disciplinas abordan la infancia, esa etapa de la que como individuos no solemos tener recuerdos propios; por eso  se aproximan respuestas a la pregunta de J. Larrosa desde la filosofía, la psicología, la historia y  sociología de la cultura, la etnografía y distintas expresiones artísticas
    La primera y no siempre evidente respuesta es la disparidad adulto-niño. El adulto se caracteriza a sí mismo por la experiencia que, según W. Benjamin,  enmascara la falta de grandeza y de esperanza, la comodidad y la rutina, la vida sin sentido. Frente a esto, el joven y el niño se distinguen por una cierta intensidad en su modo de estar en el mundo, por su vinculación con los objetos a través del juego, por la inocencia y capacidad de hacer preguntas no triviales, de crear… Porque ellos mismos son un nuevo comienzo, como dice Zaratustra al mencionar las transformaciones del espíritu. Y también una meta posible.
   Desde ese marco,  la presente sección ofrecerá distintas miradas sobre la infancia y adolescencia provenientes de variadas áreas de la cultura, así como la propuesta de acercamiento a la propia mirada de los niños y jóvenes a través de diferentes artes.

* Jugar con el arte en Rosario: el Jardín de los Niños


Para el juego del crear, el espíritu necesita devenir niño, afirma F. Nietzsche. Y la estética de las vanguardias de comienzos del s. XX , en su innovación y ruptura con las convenciones artísticas de la época,  es cercana a ese espíritu lúdico y de novedad creativa.
   Dentro de la propuesta de la Municipalidad rosarina del Tríptico de la Infancia, se puede visitar el Jardín de los Niños en el Parque Independencia. Allí reinan la imaginación y la creación, en una concepción de la persona que no se separa cuerpo y mente, ni pensamiento de acción. Especialmente en el “Territorio de la Innovación”, que ofrece a los chicos, y a los adultos que se animen, interactuar de manera concreta con los estilos y obras de artistas plásticos, arquitectos, diseñadores de las vanguardias europea y argentina.
   Información más detallada e imágenes en:
http://www.rosario.gov.ar/sitio/lugaresVisual/verOpcionMenuHoriz.do?id=926&idLugar=1715

miércoles, 10 de junio de 2015

SOBRE LOS CLÁSICOS


 “(…) es capaz de casi inagotables
repeticiones, versiones, perversiones“.
J. L. Borges




    Si clásico es lo que mantiene su vigencia a lo largo  del tiempo y, como afirma Ítalo Calvino,  “nunca termina de decir lo que tiene que decir”, en gran medida logra esa condición por las “casi inagotables repeticiones, versiones, perversiones” que admite o propicia. Los cuentos clásicos infantiles son ejemplo de eso, porque con sus cambios y permanencias, “dicen” diferentes representaciones de receptor y de la LIJ.    
   Así buena parte de la narrativa identificada con la literatura infantil clásica no tuvo siempre ese destinatario; es el caso de los cuentos tradicionales. Sus versiones más antiguas documentadas no diferencian público adulto de infantil y distan notablemente de las que circularon  a partir de ser fijadas por la escritura y adaptadas a nuevos destinatarios empleando variados criterios. 
   Con las obras creadas para niños a partir de mediados del s. XIX ocurre un fenómeno en apariencia inverso pero por el cual, finalmente, conforman un todo homogéneo con los relatos de la tradición oral. Las aventuras de Peter Pan, Pinocho o Tom Sawyer son más conocidas en las distintas adaptaciones cinematográficas, televisivas o de colecciones de libros infantiles que en sus textos originales. M. A. Díaz Rönner habla de “tradicionalización” para dar cuenta de ese proceso adaptativo.
   Algo semejante sucede con obras originalmente escritas para adultos, como Robinson Crusoe o Los viajes de Gulliver,  cuando son convertidas, mediante  recorte y simplificación,  en historias para niños.
   Pero, “la adaptación, cuando es idónea, resulta una operación rescate de textos que, sin ella, caerían tarde o temprano en el olvido”, afirma Graciela Montes con conocimiento de causa. 
  Las anteriores son algunas de las razones por las que en esta sección nos preguntamos y buscamos pistas para responder, entre otras cuestiones y aunque sea de manera provisora, qué textos pueden considerarse clásicos en la LIJ, por qué leerlos o no, en qué versiones, adaptaciones o reescrituras, qué criterios guían a sus responsables.

martes, 9 de junio de 2015

SOBRE TENDENCIAS ACTUALES


(…) lo "nuevo"
no es sólo lo que se acaba de hacer, 
sino lo que acabamos de descubrir,
 o lo que ha cambiado de apariencia, 
o lo que pide una nueva interpretación.
Blackie Books

  Así como un rasgo característico de los clásicos es su permanencia, sea esta discutida o exaltada, desde los bordes del campo de la LIJ emergen obras que van configurando tendencias nuevas; algunas se reciben con bienvenidas, otras son casi ignoradas.
  Se mueven en las fronteras, por lindar con otros lenguajes, como el libro-álbum, la historieta o la novela gráfica en los que confluyen la palabra con la plástica y los medios audiovisuales. En los bordes, por su lugar secundario frente a otras corrientes dominantes, como la poesía frente a la narrativa. En los límites, o más allá,  de lo “políticamente correcto”, como algunas expresiones del humor paródico, irónico, absurdo, negro.
  Lo nuevo conlleva desasosiego. Desacomoda. En especial a los adultos: editores, libreros, padres, mediadores varios… Porque se aparta de certidumbres, o moderadas incertidumbres aceptadas: las del mercado editorial, las del canon escolar, las de los géneros, temas y tonos “infantiles y juveniles". Porque se ubica en un espacio de complicidad creativa con un receptor que no es subestimado.
   En esta sección del blog, proponemos acercarnos a la poesía para niños, y no solo para ellos,  que transita caminos en los que la musicalidad de las palabras dialoga en diferentes registros con la imagen y diseño del libro. Por eso incorporamos poemas que se abren a múltiples modos de lectura, presentaciones musicalizadas de los mismos y acercamientos teóricos y críticos sobre este género.
  También es el lugar de las “historias en cuadritos” y del humor, que no es un género ni se limita a alguno de ellos sino que, al decir de E. Stilman, es “una actitud ante el mundo  (…) Y no se trata de una actitud alegre: los últimos límites del humorismo lindan más con los laberintos de la desesperación que con el decorado de la felicidad convencional”. ( 1967: 9)

Stilman, E. (1967)“El humor negro”. En: El humor negro. Antología ilustrada. Selección y notas de Eduardo Stilman. Ilustraciones de Hermenegildo Sabat. Buenos Aires, Editorial Brújula. Colección Breviarios de Información Literaria.

martes, 18 de marzo de 2014

VOCES Y MIRADAS ACERCA DE LA LITERATURA Y LA CULTURA INFANTIL Y JUVENIL



SOBRE EL BLOG



(…) tomando en cuenta
la encrucijada que expone al estar atravesado
por diversas miradas que lo constituyen
y que lo hacen así, incómodo e inmanejable (…)



M. A. Díaz Rönner




Sobre los niños, excepción hecha de la Childlore, quienes hablan son los adultos; es decir que la historia y la cultura de la infancia es fundamentalmente la representación adulta de representados niños que se cristaliza en distintas esferas, organismos y políticas (1) con sus respectivos discursos. Y lo que caracterizaría a los procesos de representación es su opacidad, su no transparencia, su impureza, su hibridez (2), rasgos que se potencian en la expresión artística.



Y aunque a veces por alguna grieta, los adolescentes y jóvenes se hacen oír con voz propia, las llamadas literatura y cultura infantil y juvenil son, sobre todo, “para” niños y jóvenes, por lo que la representación que se tiene de los receptores y de lo que es “adecuado” para ellos marca fuertemente los productos culturales que les están destinados.

A lo anterior se agrega la presencia de actores cada vez más diferenciados en el campo de la LIJ: escritores, ilustradores, editores, críticos, libreros, mediadores diversos, participando desde el estado y el mercado, instituciones y formaciones. Variadas voces y miradas.

Esos son algunos de los factores que tensionan el objeto LIJ, “incómodo e inmanejable” por su carácter de híbrido cultural, territorio de cruce que requiere saberes múltiples entre los que tienen un lugar indudable los saberes sobre la infancia y adolescencia, la literatura y el arte, en su entramado con la historia, la filosofía, sociología, etnografía, entre otros. Porque es pertinente desmontar miradas estereotipadas, convencionales, sobre los chicos y jóvenes, hacer evidente la opacidad de la literatura y otros productos culturales, instalar preguntas y proponer abordajes desde distintas disciplinas.

Este blog pretende recoger esa diversidad sobre la literatura, tanto la que desde hace siglos se vincula con la infancia y sigue vigente en sus versiones y adaptaciones, es decir los clásicos, como las nuevas tendencias, desde la reflexión crítica y la experiencia estética de diferentes artes.

miércoles, 5 de marzo de 2014

Sobre LA CRÍTICA



(…) parte de una conversación
sobre un hecho literario.


M. Carranza



A comienzos de los ´80, Graciela Montes identificaba la actividad crítica como un elemento constitutivo del campo de la LIJ:




Cuestionada en su legitimidad por una parte importante de la crítica, abordada a veces tangencialmente, objeto otras de comentarios impresionistas y de juicios superficiales, la LI se perfilaba hasta hace pocos años como una entidad literaria menor, borrosa y un poco inasible. (1981: 1)     

Cuestionamientos, comentarios, juicios sin mucho fundamento pueden seguir encontrándose, pero también hay otras posibilidades. La afirmación del epígrafe orienta en ese sentido al plantear un lugar en el circuito comunicacional, una actitud y un objeto para la crítica literaria.

El lugar se propone como doble: entre el autor y la obra y , en el caso de la LIJ, entre la obra y el adulto mediador, quien suele ser el que elige qué leerán los chicos. En palabras de Maite Alvarado, la lectura del crítico


devuelve a la producción literaria una imagen distanciada de sí misma, una imagen extrañada que, como todo extrañamiento, desnuda automatismos y permite transformarlos. (…) es una actividad reflexiva que complementa la actividad creativa propia del arte y la literatura. (2000: 207)




También hacia el receptor/mediador, su tarea es una invitación a “desnudarse de rutinas de lectura y así dejarse sorprender, invadir por ese objeto artístico” (Carranza, 2010), porque el crítico mismo lo ha hecho antes.

En esta “conversación entre lectores”, donde la del crítico, si bien avalada por la teoría y la pasión, es una lectura más, surgen diferencias, discusiones, acuerdos: se construye conocimiento.

Conocimiento sobre ese objeto “un poco inasible” por su carácter de híbrido cultural, territorio de cruce que requiere saberes múltiples entre los que tienen un lugar primordial los saberes sobre la infancia y adolescencia, ya que la representación del destinatario está en la base de cada obra y también de la crítica.



Montes, Graciela. (1981) “Estudio preliminar”. En Literatura infantil. Antología.Selección de Amelia Hannois. Buenos Aires, Centro Editor de América Latina, Biblioteca Básica Universal.

Alvarado, Maite. "La crítica de literatura infantil en Argentina". En: Memoria
27º Congreso Internacional del IBBY de Literatura Infantil y Juvenil. Cartagena de Indias, Colombia, 18 al 22 de setiembre de 2000.

Carranza, Marcela. Enhttp://www.imaginaria.com.ar/2011/06/sobre-arboles-sin-jirafas-y-maquinas-de-bano-cuestiones-sobre-la-critica-en-el-sistema-de-libros-para-ninos/

martes, 4 de marzo de 2014

* La crítica en los medios especializados




Cuando se habla de crítica literaria podemos referirnos tanto al cuerpo de conocimientos constituidos en una institución, por ejemplo la universidad, como a la actividad cultural que se da en formaciones, como las revistas. En el caso de las revistas literarias, publicadas on line o en papel, la crítica suele expresarse en forma de artículos y reseñas críticas.

    En la primera mitad de los ´90, nació en nuestro país La Mancha. Papeles de literatura infantil y juvenil. Inicialmente dirigida por un grupo de prestigiosos escritores, entre ellos, G. Montes, G. Cabal, L. Devetach, G. Roldán, E. Wolf., manifestaba así sus objetivos en el Editorial del primer número:
Seriamente nos proponemos explorar en las prácticas de la escritura. Buscar un perfil más amplio a nuestro quehacer instalándolo definitivamente en el terreno de la cultura en general. Volver una y otra vez sobre lo 'infantil' y sus probables condicionamientos. Reflexionar sobre las leyes del mercado y la responsabilidad que nos toca. Abrirnos a temas no estrictamente literarios pero vinculados con lo nuestro, como son los medios de comunicación y los nuevos soportes que la tecnología ofrece a los escritores. Recomendar libros, intercambiar, informar. Provocar opiniones y reproducir ideas de quienes, ahora o antes, aquí o en el extranjero reflexionaron sobre estos asuntos. También publicar textos de ficción cuya lectura creemos bueno alentar. Y otras cosas que se nos vayan ocurriendo.
La Mancha siguió apareciendo con otro consejo directivo formado por especialistas reconocidos en el campo LIJ desde el octavo número hasta el veinte (diciembre de 2006).
La revista on line Imaginaria reseña el contenido de las primeras siete ediciones en http://www.imaginaria.com.ar/19/6/la-mancha.htm y, a partir de 2007, se estableció entre   ambas publicaciones un recorrido de estrecha colaboración.
***
Ya hemos citado en varias ocasiones a Imaginaria, revista argentina especializada en LIJ. En su sección Lecturas incluye artículos críticos y reportajes, mientras que en Reseñas de libros y Libros recomendados ofrece lecturas de especialistas que procuran colaborar en la selección de material a la que se enfrentan los mediadores.
Otras publicaciones:

http://revistababar.com/wp/

                       

http://www.cuatrogatos.org/